LOS ANUNCIOS
La ausencia de vallas anunciadoras en Cuba es sorprendente. Hay algunos carteles políticos, pero no muchos. Uno que anunciaba la Reunión de Solidaridad Internacional de noviembre del 2000 decía sencillamente: “La solidaridad nunca puede ser bloqueada”. En realidad no hay anuncios comerciales de ningún tipo. Los negocios tienen señales en sus edificios, pero la ausencia de anuncios, que en otros países como los EEUU y México alucinan, es en Cuba asombrosa y agradable.
Los productos de marca son más populares que los genéricos, aunque los genéricos suelen ser más baratos. Yo pensé burlarme de mis amigos cubanos sobre cómo se tragaban los anuncios capitalistas cuando descubrí que preferían Close-Up (la pasta dental con sex-appeal) a la genérica que viene en un tubo sin marca. La genérica cuesta literalmente centavos mediante el cuaderno de racionamiento (la libreta). Sin embargo, mis amigos cubanos me mostraron el tubo de Close-Up que tenía estas palabras impresas: “Hecho en Cuba por Suchel Lever, Habana, Cuba por acuerdo con los propietarios de la marca.”
LA TELEVISIÓN CUBANA
Al igual que en los EEUU, los cubanos con frecuencia encienden sus televisores y se van dejándolos como un sonido de fondo en sus vidas. La televisión parece ser la fuente fundamental de noticias y entretenimiento. Para alguien como yo que raramente ve televisión, la TV cubana resultó fascinante. También la veía para que me ayudara a aprender español.
Cuba solamente tiene dos canales: Cubavisión y Tele-Rebelde. No transmiten 24 horas al día. Los formatos son similares a lo que podemos ver en los EEUU, pero hay diferencias abismales. ¡Imagínese la televisión sin anuncios! No hay anuncios comerciales de ningún tipo. Tienen algunos anuncios de servicios públicos (no malgaste el agua, ahorre electricidad, fumar afecta su salud, no abuse del alcohol, etc.), Éstos son cortos, menos de un minuto cada uno y bastante ligeros.
Se ponen películas de todo el mundo, algunas en sus idiomas originales con subtítulos y otras dobladas. “Murder, She Wrote” (doblada) es muy popular. Yo disfrute la dulce y sentimental “Stuart Little” (doblada) seguida por un documental sobre cómo se hizo la película “Honey, I Shrunk the Kids,” (subtitulada). Una serie alemana de misterio titulada “Decker” también es muy popular.
Una noche en un antiguo y bello hotel de Centro Habana totalmente remozado, estaban viendo (¡no estoy bromeando!) “The Brady Bunch” (doblada al español). Las telenovelas son la gran cosa, incluida una que se desarrolla en Cuba durante la época de la esclavitud. Otras de Brasil, Argentina y otros países latinoamericanos son muy populares. También se transmite música cubana de todos los estilos desde el son a la salsa, el bolero y el hip-hop.
Los programas de noticias cubren los tópicos básicos: la actividad diplomática cubana, las reuniones internacionales, etc. Podemos reconocer formatos familiares. El contenido, sin embargo es muy diferente. El noticiero de la noche comienza con referencias a ese día en la historia, desde el siglo XIX hasta el presente. Diariamente se marca algún hecho político o histórico, ya sea en la TV o en reuniones públicas. También vi en la TV cubana un extenso documental PBS sobre los malos tratos a los inmigrantes por parte del INS.
Durante la batalla por recuperar a Elián González de los EEUU se inició un programa diario de análisis noticioso titulado “La Mesa Redonda” en el cual periodistas cubanos y académicos discutían asuntos de actualidad. En el programa se invita a activistas y expertos de otros países para que expresen su opinión. Después del regreso de Elián, La mesa Redonda se mantuvo como parte de la programación regular. Tiene un público invitado al estudio, pero son observadores, no participan en las discusiones. De vez en cuando Fidel aparece en el programa, pero no lo hizo durante mi estancia en Cuba.
Cuba prometió que una vez que Elián fuera repatriado, no habría cobertura televisiva indiscreta. La promesa se ha mantenido. El niño y su familia rara vez se han visto en TV, excepto en su fiesta de cumpleaños en la escuela el 6 de diciembre. Fidel habló brevemente al igual que Juan Miguel. Aparte de eso el entretenimiento consistió en niños cantando, payasos actuando y un enorme cake de cumpleaños.
Un elemento frecuente en los medios cubanos son las entrevistas a cubano-americanos como Francisco Aruca, un hombre de negocios de Miami y personalidad de la radio que favorece la normalización de relaciones. Aruca, quien se opuso a la Revolución años atrás, actualmente dirige una agencia de viajes que trae a cubano-americanos a la Isla para visitas familiares. Durante el viaje de Fidel a México, La Mesa Redonda, presentó una entrevista a Peter Gellert, un organizador clave en México de la solidaridad con Cuba. Gellert, un viejo amigo, nació en los EEUU y fue activista en los 1960´s. Nos conocimos como miembros entonces del Partido de los Trabajadores Socialistas de los Estados Unidos.
PARTICIPACIÓN POLÍTICA
La participación pública en la vida política se manifiesta de diferentes formas. Yo observé y participé en algunas de ellas. Las más conocidas por los extranjeros son las concentraciones y las marchas porque son frecuentemente utilizadas por los medios en los Estados Unidos para describir la vida en Cuba. Fueron algo cotidiano durante la lucha por Elián y todavía continúan. Elián fue el más conocido de los cientos de miles de inmigrantes ilegales cubanos que arriesgando la vida viajan a los Estados Unidos estimulados por la Ley de Ajuste Cubano.
Para educar a la población sobre los peligros de las salidas ilegales, los cubanos se siguen movilizando. Concentraciones y marchas se producen semanalmente a lo largo del país. A veces Fidel Castro les habla, otras veces no. A veces habla durante largo rato, otras veces no. Fidel es de muchas maneras una figura más grande que la vida. La gente se pregunta cómo y por qué Fidel habla con tanta frecuencia y durante tanto rato. Muchas de las cosas que dice en esos discursos (y yo he escuchado y leído unos cuantos) son conocidas. En ocasiones parecen repetitivas. Yo no tengo la paciencia para escuchar durante varias horas de una tirada.
Pero, por supuesto, Fidel no está hablando para personas como yo. El está explicando las realidades políticas a los jóvenes cubanos que tal vez no puedan comprender lo que está sucediendo y a algunos mayores que las han olvidado, o que nunca las comprendieron. Algunos cubanos encuentran sus discursos aburridos; muchos no los escuchan completos, pero yo me sorprendí de ver cuántos sí los escuchan completos, aunque nadie está obligado a hacerlo. Uno puede sencillamente cambiar de canal o apagar el receptor.
Un posible peligro parece ser la brecha generacional. El Gobierno SABE que pueden surgir problemas de una generación que tiene acceso a más y sabe más acerca de las cosas que no puede tener que las generaciones anteriores. Por otra parte, los jóvenes cubanos NO conocieron de manera directa la situación de sufrimiento, pobreza, malnutrición y explotación que existía antes de la Revolución. De ahí la intensa atención de Fidel a la juventud. De ahí el nombramiento de Felipe Pérez Roque como Ministro de Relaciones Exteriores. Con 34 años de edad, Roque es posiblemente el Canciller más joven del mundo. De ahí el gran énfasis en los deportes, los diplomas y otras formas de reconocimiento público.
Cuba tiene un sistema político con un solo partido. Eso significa que las grandes decisiones políticas están centralizadas en las manos del Partido, y dentro de éste por su dirigencia encabezada por Fidel. Otros partidos que existieron con anterioridad al triunfo de la Revolución, y que se mantuvieron posteriormente, se negaron a aceptar el cambio fundamental que se produjo. Se movieron a aceptar la oposición ilegal armada. El Partido Comunista de Cuba fue la fusión de tres organizaciones predecesoras y no ha tenido una división desde su fundación en 1965.
En un mundo ideal (no vivimos en uno) es saludable para la sociedad que un rango de puntos de vista y alternativas políticas se puedan discutir y debatir públicamente. Mientras que los Estados Unidos mantengan como punto No. 1 en su política derrocar la Revolución Cubana, Cuba no podrá tener un sistema pluripartidista. Eso tiene consecuencias (buenas y malas) pero, en mi opinión, Cuba no tiene otra opción que no sea la de organizarse como lo ha hecho. No hago una virtud de esta necesidad. Es sencillamente lo que Cuba necesita ahora.
Una explicación autorizada del enfoque cubano se puede encontrar en el libro Herederos de la Historia, que fundamenta la política cubana de unir a todos los que apoyan la Revolución en un solo partido político. Comienza con un ensayo de José Martí y tiene además explicaciones profundas sobre el concepto hechas por Fidel Castro y por Fabio Grobart y Juan Marinello, líderes del antiguo Partido Socialista Popular (PSP).
Para obtener información sobre el sistema político de Cuba, puede consultar dos libros que lo describen en detalle: Democracy in Cuba and the 1997-98 Elections por Arnold August (Editorial José Martí, 1999; ISBN: 0968508405, $24.00) y People’s Power: Cuba’s Experience with Representative Government por Peter Roman (Westview Press, 1999, ISBN: 081335868, $60.00). Ambos se pueden obtener fácilmente a través de Internet.